viernes, 15 de agosto de 2014

¿CÓMO PUEDO?


Ana María Sanchis 

¿Cómo puedo yo, dudar de tu existencia
                                                   o cuestionar tus orígenes divinos?

Si en cada instante que transcurre, Señor mío,

hay un milagro brillando en mi camino.
Si tan sólo, como puedo disfrutar,
al escuchar de los pájaros sus trinos,
                                                al embriagarme  del sol con su tibieza,

al mirar el verde intenso de los pinos.

Al percibir, eterna la danza de los mares...
Y al deleitarme, con las risas de los niños.
Cómo puedo yo dudar de tu existencia, mi Señor,
si en cada día amanecido, la percibo.
Si son sólo tus ángeles, la calma
al punzar de mis dolores más antiguos.
Si es tan sólo, la fuerza de Tu Mano,
quien me sostiene, si caigo en el abismo.
Y es inmersa en Tu Luz, vertiente de energía,
que profundizo, la esencia de los siglos.
Por eso, dime Tú, ¿cómo yo puedo?...
¡Dudar de tu existencia, Señor mío!


=======================================================================
VOLVER  ARRIBA




LA NIÑEZ

.

Ana María Sanchis


La niñez... ese mundo de magia y caramelo,
donde guía los pasos, nuestro Ángel Guardián.
Donde anidan los sueños translúcidos,  etéreos
y con duendes traviesos, desmigamos el pan.

La niñez, ese cielo de caminos ingenuos
en que, con la inocencia se puede transitar.
La de dientes de leche y manos pegajosas,
la de ojos asombrados aún... ¡sin contaminar!

La que estalla en la risa, cual cascabel del cielo
o se quiebra en mil lágrimas de fulgente cristal.
La de juegos y cuentos con dulzor de ternura,
la de las golosinas, con tibieza de hogar.

¡Niñez!...Burbuja plena de soles y recuerdos
en que nos abstraemos cuando, cansados ya,
del nefasto presente que nos hiere y agobia,
buscamos...¡Un remanso, para no claudicar!


==================================================================
VOLVER  ARRIBA